Esa sensacion de anticipacion, de anhelo, cuando los segundos son eternos, esperando oír Sus Pasos.
Aguardándole, deseandole, sufriendo la dulce agonía del placer insatisfecho.
Por que el tiempo del dolor, el tiempo de las lágrimas, de los suspiros, de los gemidos, del goce llegaran solo cuando al Amo plazca usar Su posesión
La kajira se pliega enteramente a la Voluntad de su Dueño.
Ni lágrimas, ni reproches, solo el callado ruego de su cuerpo ofrecido que espera.
Y mientras las tres Lunas de Gor trazan su camino nocturno por los cielos de la Contratierra,ella languidece, húmeda, febril,los ojos brillantes de deseo.
Arde, se quema, duele en la espera, duele en el ansia por ser poseída, por ser usada,torturada, humillada, colmada de oprobio.
Agoniza, y las horas solo acrecientan el tormento.
Llegara el momento, llegara la hora, por fin, al fin de estar ante El...
Toda para el Amo.
